Constelaciones y aborto

La gestión del aborto puede tener efectos secundarios en la mujer. Estas consecuencias son derivadas de la inconsciencia al gestionarlo y de los intentos por tratar de olvidarlo como si no hubiera ocurrido.

Pero toda mujer que ha abortado tiene presente que en su vientre había vida en desarrollo y asume una fuerte carga interna por el hecho de que esta vida se vea interrumpida, sea por causa voluntaria o no. Existe un dolor y una responsabilidad que si no son mirados generan la sensación de dejar algo pendiente.
No disponemos de la capacidad para decir si existía una acción mejor que otra, por tanto, abordarlo con valor, sin juicios ni prejuicios implica una oportunidad de mejora para todo el sistema, tanto para los que están afectados directamente como para las personas que vendrán después y que se ven afectadas indirectamente, muchas veces sin saberlo.

Pocas veces la mujer va a considerar que está sufriendo consecuencias a lo largo de su vida que guardan relación con el acontecimiento. Estas consecuencias pueden ser depresiones, sensaciones de culpa, separaciones matrimoniales o incapacidad de mantener una relación estable de pareja. Esto puede ocurrir aún muchos años después del aborto.
Las constelaciones permiten alcanzar resoluciones aportando sanación a estos acontecimientos para que estén al servicio de la vida.
El padre también puede abordar el acontecimiento para sanación en la parte que le corresponde.