10 Causas por las que no consolidan las Nuevas Relaciones – 6ª causa
Hoy os compartimos la 6a causa que hemos detectado que impide la consolidación de Nuevas Relaciones.
6. Implicación con sistemas de pensamiento de personas que nos preceden
En algunas familias los conflictos entre hombres y mujeres generan sistemas de pensamiento que se tornan densos y pesados porque se trasladan a las siguientes generaciones como normas a seguir. Estos sistemas de pensamiento son consolidación de formas de percibir e interpretar vivencias. Se convierten en carga pesada para quién los hereda pues se ve impelido a actuar inconscientemente con fidelidad hacia a ellos, a la vez que su comportamiento puede alternar con movimientos de signo contrario, más acordes con su sentir propio. Ejemplo: Nos encontramos con un caso en el que, en varias generaciones atrás, tenemos una familia de alto nivel adquisitivo y social. La hija es educada en consonancia a ese rango, y preparada para tener un esposo que la admire, la mantenga, y él sienta que ella está a la altura de su posición. Ella se adapta al escenario y al plan, y lo interioriza como su derecho y la manera correcta en que debe vivir su vida. Y así sucede que aparece este marido, que todavía la posiciona más alto en la escala social, y pasan a formar parte de la aristocracia o élite. Sus hijos van a estar educados también en este entorno. Pero 3 generaciones después, una mujer que ya no ha heredado ni la posición social ni la economía que la acompaña, se enamora de un profesional de a pie, sin rango social definido, o en cualquier caso, no perteneciente a la élite. Las voces internas en esta mujer favorecen pensamientos del tipo “este hombre no está a mi altura”, “este hombre no es adecuado para mi”, y así, se siente dividida entre un sentimiento que la atrae hacia este compañero y unos pensamientos que la empujan a encontrar defectos con suficiente justificación para apartarse de él o recriminarle permanentemente cualquier comportamiento que le desagrade. Si las voces persisten, que suelen hacerlo, la relación no consolidará. Ejemplo: Al constelar, ponemos a la pareja uno frente al otro. Y detrás de ellos, a las respectivas conciencias familiares. Notamos todo el peso y discurso que intentan mandar a sus hijos/as respectivos. En un momento retiramos a la pareja de la escena y dejamos que ambas conciencias familiares se miren una a otra. Y percibimos la tensión y conflicto que subyace. Una le dice a la otra “Yo soy mejor que tú”. Estos casos los encontramos a menudo cuando se dan diferencias de tipo económico; de territorios, ya sea países, comarcas o ciudades; de razas, etnias o color de piel; de ideología política; de religión, …. Todas estas diferencias conllevan diferencias también de entender la relación entre hombre y mujer, diferencias entre como debe manifestarse y posicionarse la energía masculina y la femenina, y una idea propia de lo que es correcto y de lo que es erróneo; siendo la norma interiorizada la siguiente: “como nosotros hacemos es cómo se debe hacer, y como vosotros hacéis, es erróneo”, y así, ambas partes interfieren en la relación intentando empujar a sus respectivos parientes en la dirección que ellos creen que es mejor. Sin lugar a dudas, esto afecta a la pareja si no saben alejarse de esta influencia para crear sus propias formas de hacer en la relación nueva que construyen. Todo ello pasando por un profundo respecto por las vivencias de los respectivos sistemas, especialmente las de dolor. En el libro que estamos escribiendo compartiremos meditaciones para poder instaurar la Paz para todas las partes en estas circunstancias.